Maranatha Estado de México "El lugar donde lo inesperado puede suceder"
02/04/2023.
Pastor. Raúl M. Ibarra
Debemos sentirnos dichosos por ser hijos de Dios, cada vez que una persona conecta con el PADRE, Él da lo mejor para nosotros sus hijos, es más ya lo dio en su hijo Jesús, cuando entrego a su hijo Jesucristo, lo entrego por ti y por mí, sabiendo que fuimos llamados desde el vientre de nuestra madre.
Nosotros no somos una coincidencia en el mundo, nosotros somos un propósito en esta tierra, debemos aprender a mirar con ojos espirituales para entender que la manifestación gloriosa de los hijos de Dios se va a dar en el tiempo que Dios quiere y si alguien tiene sus ojos espirituales bien abiertos, el cielo desciende.
“Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.”
2 Timoteo 1:7 RVR
El espíritu de poder es el que Dios nos da, donde tu temes el diablo se ensaña, por eso hay gente que tiene miedo de perder algo y lo pierde, temen perder su trabajo, su matrimonio, en lo que va a pasar y el diablo se va a ensañar, porque el temor es lo que atrae a satanás, pero Dios no nos dio un espíritu de temor, Él nos dio un espíritu de poder, de amor y dominio propio.
Los hijos de Dios no estamos temiendo las cosas, sabemos que hay poder de Dios para salvación y restauración, dice la palabra que Job temía lo que iba a pasar por sus hijos y elevaba ofrendas, oraba de una manera temerosa, que lo que tanto temía le sobrevino.
Satanás huele el temor y se ensaña de eso. Pero Dios no nos dio espíritu de cobardía y nuestra decisión es creerle a Dios, Que el sana, da libertad y transforma vidas y que, así como Dios tiene una sustancia en su ser de valentía, nos declaramos valientes ante cualquier adversidad en el nombre de Jesús.
“Los envió, pues, Moisés a reconocer la tierra de Canaán, diciéndoles: Subid de aquí al Neguev, y subid al monte, y observad la tierra cómo es, y el pueblo que la habita, si es fuerte o débil, si poco o numeroso; cómo es la tierra habitada, si es buena o mala; y cómo son las ciudades habitadas, si son campamentos o plazas fortificadas;y cómo es el terreno, si es fértil o estéril, si en él hay árboles o no; y esforzaos, y tomad del fruto del país. Y era el tiempo de las primeras uvas.”
Números 13:17 RVR
Hay una promesa que Dios siempre da para tu vida, hoy en día Canaán no solamente representa una tierra física, Canaán representa la solución al problema que estas pasando y si Dios lo permite podrás conquistarlo, debemos de preparar nuestro corazón para las próximas conquistas que nos de Dios y lo que viene es mejor.
Muchas veces pensamos de acuerdo con nuestras capacidades el poder de las cosas, queremos tener todo asegurado antes de dar un paso; el solventar gastos, edificar un gran inmueble, pero eso no es fe, eso es lo humano en nosotros y la capacidad para lograrlo. La fe es denotada cuando no se tiene la posibilidad, pero aun así lo creamos, el decidirle creer a Dios, eso se llama fe.
En ocasiones lo que queremos hacer en nuestra vida es tener todo bajo control, pero es mejor que Dios tenga el control de ella, cuando uno tiene espíritu de cobardía se va a reflejar en la preocupación, pero el espíritu de valor se nota en lo que haces. Dios nunca prometerá nada que no puedas alcanzar, así que si Dios ha prometido algo Él lo va a cumplir y lo podremos conquistar aun con los retos que se presenten.
-Cuando le crees a Dios, comienzas a ver con ojos espirituales-
Lo que veas con ojos espirituales, serás capaz de poseerlo, tú puedes ver las cosas creyendo lo que Dios dijo cuando en la palabra tu estas leyendo algo que Dios te pone en tu corazón, entonces tú puedes tener certeza que es algo que está viéndose en tus pensamientos.
Dios va a hacer prosperar nuestra vida; no veras solo palabras, veras imágenes que te muestren el poder de Dios para realizar y cumplir sus promesas. Si eres capaz de verlo en espíritu, serás capaz de conquistarlo en esta tierra.
Si no miras con ojos espirituales, todo lo que veas temerás, hay a veces que Dios nos abre los ojos y comenzamos a ver la condición de nuestro corazón, ahí es cuando pedimos al PADRE que nos renueve, que nuestros ojos sean abiertos para ver a Dios y saber que Él tiene la solución de cualquier problema.
Cuando miras con ojos naturales ves lo incierto de la vida y eso causa temor y no le encuentras sentido, no podemos encerrarnos para evitar que las cosas sucedan por el temor, debemos salir y demostrar que en Cristo somos la luz del mundo.
Uno de los problemas que se tienen en la actualidad es que los padres somos sobre protectores, lo mejor que podemos darles a nuestros hijos, es el valor del reino, para cuando salgan sean hombres y mujeres valientes, porque si ellos tienen a Dios en su corazón, Dios va a pelear por ellos todos los días de la tierra.
Cuando miras con ojos espirituales, vas a tener la certeza de que el poder de Dios está sobre ti. No te midas con la gente por su capacidad o nivel adquisitivo que tengan, por el poder o renombre que carguen, puedes medirte con ellos por el Dios que tienes, teniendo el poder de Dios sobre nuestra vida, con eso es suficiente para medirnos con cualquiera.
“También vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes, y éramos nosotros, a nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos.”
Números 13:33 RVR
Si tu no conoces quien está contigo siempre tendrás miedo, nadie dijo que esto era fácil, pero si sabes quién está contigo, quien contra ti. El problema es que pensamos que estamos solos, pero Dios nunca nos ha dejado solos, ni nos dejara.
Si Dios no te ha dejado, no lo dejes a Él, no importa que gigante se pare delante de nosotros confiemos que Jehová de los ejércitos está con nosotros como poderoso gigante. Nosotros no somos los poderosos, sino es Él que está en nosotros.
-Logramos y conquistamos las cosas porque Dios está con nosotros-
“Entonces Caleb hizo callar al pueblo delante de Moisés, y dijo: Subamos luego, y tomemos posesión de ella; porque más podremos nosotros que ellos.”
Números 13:30 RVR
El creer y levantar la vos es saber que Dios está con nosotros, eso lo sabemos por nuestra oración constante, porque la verdadera fe en Dios se manifiesta en los labios del hombre, no solamente en el corazón, porque el corazón cree y la boca confiesa.
-Lo que el corazón conecta con Dios lo va a hablar tus labios-
Se tiene la opción de decir que algo no es posible de hacer siendo eso natural y Dios no tiene problema con ello, pero cuando se recibe la fe de Dios, es casi imposible que podamos decir no puedo, porque ya no estaremos viendo nuestras posibilidades sino las de Dios.
-Creemos en Dios y estamos con Dios todo es posible-
Hoy en día debemos pedir sabiduría, porque cuando más abunda el pecado hay alguien que debe levantar la voz con fundamento, no con ira ni emoción, para mostrar lo equivocado que están.
Levantar la voz es poner delante de Dios la situación, en oración pidiendo la intervención divina para mostrar los errores y afectaciones que se tienen en una sociedad.
“si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra”.
2 Crónicas 7:14 RVR
¡México será para Cristo!
La influencia de un hombre vestido del poder del Espíritu Santo es mayor que cien sin el espíritu, un solo hombre usado por el Espíritu Santo de Dios ha tenido la capacidad de mover ciudades, aun no siendo un gran líder.
Podemos ver algunas cosas que Caleb vio para levantar la voz:
· Mayor es el que está con nosotros que el que está en el mundo.
· Si tenemos el poder de Dios, nos hace más poderoso que cualquier otro.
· Dios no nos dio espíritu de cobardía.
· Nadie gana lo que no enfrenta. “Porque nuestras armas no son carnales, sino poderosas en Dios para destrucción de fortalezas”.
· Les recordó lo que Dios había hecho en Egipto.
Cada vez que hay una nueva batalla que conquistar, siempre recuerda lo que Dios ya hizo. En las dificultades es más fácil salir que entrar, por que salir implica solo caminar dando la espalda al problema y entrar requiere enfrentarlo.
Cada día hay una batalla que tengo que pelear y la voy a ganar, esforzándome y en valentía, porque el que estuvo con Moisés estará conmigo y llevare en mi vida la imagen de nuestro Dios.
Porque soy su hijo, siendo coheredero juntamente con Cristo y las promesas de Dios son para sus hijos, peleare con mis ojos espirituales levantando mi voz, así como Caleb, para pelear la buena batalla y que no importa lo que pueda venir, vamos a prevalecer.
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